
Pero ningún evento noticiable de la farándula, ningún
fracaso cinematográfico, nada que yo haya visto en o acerca del Cine se sintió
tanto como una pérdida.
Tardé dos días en poner mis sentimientos al respecto en
palabras. Me tomé demasiado.
Ningún artista en mi vida marcó tanto mi infancia. Las risas
que compartía con él no eran como cualquiera. No eran risas sistemáticamente
procesadas por mi mente, eran risas que alcanzaban algo encerrado en mi alma.
Eran alimento para un niño oculto en mi interior, que aprendía no solo
a apreciar el mundo que veía, sino a creer en un futuro y en una esperanza de
dejar una huella propia.
El llanto nunca era de tristeza o amargura. No era una
áspera lija pasada por mi garganta o una pesa incómodamente apoyada sobre mi
pecho. Era un llanto de reinvención, como las lágrimas que quedan en el rostro
después de levantarse de una caída. Era un llanto de optimismo, un llamado a
cosas nuevas, una purificación para hacerle un lugar al asombro sencillo.
Con una rebelde inocencia nos contaba historias sobre la
paciente espera a los despertares de la vida, sobre cómo el miedo al mañana no
tiene la magnitud o el valor de las decisiones del presente, sobre cómo la
amistad puede salvar vidas y liberar cadenas, sobre el amor paternal y las
locuras a las que nos lleva a hacer, sobre cómo las obsesiones y
excentricidades pueden llenar de color nuestra vida, o, a veces, hasta dar
miedo. Sobre todo, mostró que la risa y la companía no pueden subestimarse. Un
niño grande. Un hombre que le dio a tantos humoristas, profesionales y
anónimos, una confianza que no pudo obtener para sí. Un capitán que se hundió
con su barco. Un tipo frágil que conquistó a más gente con fragilidad que con
fuerza.
Y la ironía trágica de este portaestandarte del entusaismo
es que nunca descubriría la cantidad de vidas que tocó ni lo cercano que era el
alcance a aquello que buscaba. Ojalá ya lo hayas escuchado. Ojalá mis palabras
no sean originales. Pero gracias por los años de risas.
Que por fin descanses, Robin, en la más pacífica de las
paces.
"You don't know about real loss. Because it only occurs when you love something more than you love yourself"
No hay comentarios:
Publicar un comentario